De repente la duda me asalta, pero la pregunta no es la que cabría esperar, la cuestión no es saber si soy o no un error de casting. La cuestión es ¿en que falla este casting? Una melodía melancólica me acompaña, catalizadora. No sé si soy error de casting por perderme entre los boulevares, por no saber si debería ir hacia arriba o hacia abajo, por la derecha o hacia la izquierda. De momento me encuentro en medio y dos filas de chopos en flor me impiden ver lo que hay más allá. Sé lo que hay de un lado y me gusta, pero no me llena... ¿y del otro? Estoy parado y no se si realmente quiero moverme. Pero más allá de eso puede que el error de casting no sea sólo yo , sino que, con premeditación y alevosía, el fallo estribe en mi personalidad; en quedarme con las frases absurdas e intentar hacerlas mías, en emocionarme con una película que nada tiene que ver conmigo; que solo pretende entretener al sueño para que llegue más tarde. El caso es que el error de casting se hace más insoportable. El sentimiento que me llena me nubla la mente y no lo consigo entender... alguien dijo que por el bien del ser humano, la auricula derecha del ocrazón debería estar dentro de nuestro cráneo...
Si me encuentro con la aridez hecha persona me siento mal, quiero encontrar un oasis y si lo encuentro me doy cuenta de que solo es un espejismo porque nunca llegaré a alcanzar ese oasis que deseo y en el que pienso incluso cuando no tengo ninguna sed. Esto sin duda es un error de casting... y si algo he aprendido de mi estancia al lado de Norma es que todos sufrimos el error de casting, los primeros los actores del guión que les ha tocado interpretar, pero esos poco importan. Más importantes son los espectadores, los regidores, los iluminadores, los atrezzistas... que sin tener nada que ver, tienen que lidiar con los desencantos de unos y de otros y notan el fallo, y nada funciona completamente bien. Las frases - siendo lo más literal- suenan falsas y aún cuando no lo son, servidor, que en este momento se siente protagonista, busca más significados, donde está claro que no los hay... Busca en el resto del equipo lo que quiere escuchar y está claro que no puede encontrarlo porque no existe aquello que necesita para poder dar sustento a una fantasia... Hace tiempo que un filósofo dijo que iba a ayudarme... Norma empieza a pensar que soy un caso perdido, o a lo mejor lo que ocurre es que y es hora de que deje de lado la experiencia y el racionalismo.
Norma & James
Un pájaro de papel en el pecho dice que el tiempo de besarte no ha llegado. Vicente Aleixandre