El diablo viste de Prada

No es casual la desbandada hacia lugares de musculación, del mismo modo que no lo es la ansiedad - sutil, todo hay que decirlo- causada por las reuniones sociales prefijadas donde, si bien no es rigurosa la etiqueta, si está bien visto el aparecer arreglados y a la última... como de hecho ya apareció Norma, ataviada con lo último del New Look de Dior...
Pero tampoco es necesario ponerse drámaticos: el aprovechar cada segundo, el cuidar cada detalle tanto físico como intelectual es cierto que nos produce placer -tal vez un tanto sadomasoquista- y nos hace darnos cuenta de que aunque quizá en este momento no esté en trazas el guión para un Goya, si que nos estamos formando para un mundo competitivo donde todo cuenta: ya no solo lo que vendamos, sino como lo vendamos, como NOS vendamos... Y hay un acontecimiento social a la vista....
Por otro lado, el duelo fijado para esta jornada se postpone hasta un futuro inmediato pero indefinido... y Penélope y la Maura vuelven a aparecer, puntuales, en mi vida sembrando más inquietudes e incertidumbres.
Norma & James
Nada está perdido si se tiene el valor de proclamar que todo esta perdido y hay que empezar de nuevo. Julio Cortázar
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